viernes, 13 de mayo de 2011


Usualmente resulta útil iniciar cualquier discusión sobre la globalización con una definición del término. Como cualquier otra palabra, podemos estipular cualquier cosa que queramos acerca del significado de la globalización, pero no todas las interpretaciones son tan buenas como las otras. La mayoría son simples intentos por ganar el debate antes de que éste inicie. Yo ofrezco una definición que considero que captura lo esencial del tema, en lugar de ser un pedazo de propaganda en uno u otro sentido.
Es común que los críticos de la globalización—quienes a menudo insisten en que no son enemigos de ésta, sino promotores de una “globalización alternativa”—utilicen el término simplemente para referirse a la maldad humana o a la avaricia, o a los supuestos efectos indeseables del creciente comercio mundial. Empecemos mejor con una definición operacional y luego preguntémonos si los efectos de la globalización que hemos señalado son deseables o no. Yo uso el término para referirme a la disminución o eliminación de las restricciones impuestas por el Estado sobre el intercambio voluntario a través de las fronteras, y al cada vez más integrado y complejo sistema mundial de intercambio y producción que ha surgido como resultado de la eliminación de dichas restricciones estatales sobre el comercio voluntario a través de las fronteras.
La interrogante política fundamental se centra en si estas fronteras debieran ser utilizadas para impedir las transacciones entre personas que se encuentran en diferentes lados de las mismas. ¿Se debe permitir que los productores de trigo estadounidenses compren teléfonos celulares hechos por finlandeses? ¿Se debe permitir que las tejedoras ghanesas vendan las camisetas y los pantalones que confeccionan a los fabricantes de automóviles alemanes? ¿Se debe permitir que los inversionistas taiwaneses compren activos de los kenianos? ¿Se debe permitir que mecánicos mexicanos reparen carros en Ottawa o Chicago? Obviamente una lista de estas puede continuar indefinidamente, pero creo que queda claro a lo que me refiero. Si un intercambio es permitido porque ambas partes se encuentran del mismo lado de una frontera, ¿debería impedirse si en cambio una parte se encuentra a un lado de esa frontera y la otra parte está al otro lado?
Ahora hablemos de cultura. El término es utilizado en una gran variedad de formas, a menudo durante el curso del mismo ensayo o consideración. Éstas incluyen: el cultivo de ciertas capacidades humanas; arte (típicamente el término es reservado para el arte “de altura”; la reacción contra este uso de la palabra ha estimulado mucho estudio de la “cultura popular”); y las formas de vida concretas que la gente lleva en común. En general, los críticos de la globalización se refieren al segundo y tercer uso de “cultura” cuando realizan sus críticas. Mi enfoque girará alrededor del tercer uso del término, en lo que Peter Berger llama, “su sentido social científico convencional: como las creencias, valores, y estilos de vida de la gente común en su existencia diaria”2.
¿Debemos acoger y abrazar, o temer y rechazar, la interacción y mezcla de culturas, gentes, razas, comunidades, y visiones de mundo que traen el comercio y la interconexión globales? En particular, ¿es cierto que la globalización nos está conduciendo a una cultura mundial homogeneizada, una en que la vida en Brasil se acerca cada vez más a ser indistinguible de la vida en Baviera, o—más apropiadamente—está llevándonos a un mundo en que todos los países se parecen al sur de California?
El libre comercio está siendo atacado. Sus defensores están acostumbrados a refutar la doctrina de la balanza comercial y otras falacias sobre los países “compitiendo” económicamente unos con otros1. Sin embargo, no están tan acostumbrados a responder las críticas “culturales” al comercio. Los promotores de las barreras comerciales insisten que el libre comercio y la globalización destruyen la cultura. Pero, ¿produce la globalización una homogeneidad cultural y la pérdida de diversidad? ¿Está siendo amenazada la “autenticidad” cultural por la globalización? ¿Está el planeta en peligro de verse ahogado en un gran charco de monotonía? ¿Y debemos temer una pérdida de identidad personal conforme los miembros de diferentes culturas intercambian ideas, productos, y servicios? Los argumentos culturales contra el libre comercio, tal y como lo veremos, no son nuevos. Y son igual de falaces como los argumentos económicos contra el libre comercio.

cultura y gobalizacion

Dado que concebimos a la cultura como una dimensión de todos los fenómenos sociales distinguible analíticamente pero no separable como proceso autónomo-, entendemos que el análisis de la “globalización” desde la dimensión cultural está íntimamente vinculado con el estudio de ese proceso en el plano histórico, económico, político y financiero.
Los cambios culturales han acompañado de manera compleja los episodios derivados del intercambio comercial y la intromisión política en todos los continentes. La reflexión sobre la cultura y el intrincado itinerario semántico que atravesó este concepto, están profundamente vinculados con el desarrollo de la tecnología y con el avance colonial que puso a los europeos en contacto con costumbres diferentes y con extraños modos de vivir y de resolver los problemas de la existencia.
Falta de una cultura de "seguimiento" continúo para asegurar el logro de los objetivos propuestos y de disciplina para escribir y compartir los aciertos y desaciertos y el respectivo aprendizaje. Somos buenos para "evaluar", muchas veces reactivamente, y controlar sin mirar el valor del proceso y del aprendizaje.


La cultura es el rasgo que identifica a cada comunidad humana, es aquella arquitectura que las comunidades humanas consideran más perdurables que sus templos de mármol.
En la actualidad los grandes avances tecnológicos, así como la aceleración económica y la gran rapidez en la transmisión en los medios de comunicación han logrado derribar en gran parte las barreras limítrofes para dar paso a grandes mercados logrando la expansión de grandes consorcios así como generando una aceleración entre el intercambio comercial entre diferentes naciones. Es de criticarse hasta que punto tiene sentido esta aceleración económica y en que medida tiende a afectar la cultura de una nación o de un pueblo.
Dentro de este fenómeno la cultura ha tenido un nuevo acceso al consumismo  tal ejemplo; es el de consumir la música, los usos y costumbres, la ropa, las que se practican en los países globalizadores así como también el consumismo cultural el cual consiste en viajar por los diferentes países y extraer diversos bienes que existen en cuanto al ámbito cultural.
La globalización es diferente por la forma en que influye sobre las culturas locales, así como en la forma en que esta se ve afectada por la cultura local, porque los procesos suceden con una rapidez distinta en cada uno de los países del mundo.
El objetivo de este trabajo es de realizar una crítica constructiva teniendo como parte central el análisis de la influencia de la llamada “globalización” en la herencia cultural futura y como afecta en gran medida a la sociedad.
El proceso por el cual la persona se ve compulsivamente inmersa en unos modos de vivir que no ha buscado y que son el producto de la voluntad de grupos supranacionales y culturales que actúan con vistas a sus exclusivos intereses de lucro y de poder, es la enajenación no de la economía, ni de los intereses materiales, sino, del hombre y de sus esperanzas, trabaja el hombre por un salario que no le sostiene en pie hasta otro día, camina por senderos y hacia destinos que no conoce ni ha elegido, oye hablar una lengua que le es totalmente desconocida, valores como verdad, justicia, solidaridad le son remotos, y entonces no sabe porque trabaja, porque vota si al cabo de los comicios su voluntad y sus esperanzas serán los grandes ausentes.
a) Que se entiende por globalización.
Este término se refiere a una in testificación sin precedente y una aceleración de un flujo cada vez mayor de las comunicaciones y el movimiento de gentes, tecnología, dinero, bienes, imágenes e ideas a trabes de las fronteras nacionales, esta interacción mas allá de las fronteras vincula de hecho o potencialmente a individuos, organizaciones, países y culturas, sin embargo, la interdependencia que resulta de esos vínculos es frecuentemente asimétrica, en su sentido mas pleno, la globalización es un proceso que surge de dos desarrollos históricos mutuamente conexos uno es el avance en las tecnologías de las comunicaciones, la información y el transporte.
El otro es la implementación de políticas liberales y la apertura de mercados locales al flujo internacional de bienes, servicios, tecnología y, en especial, de capital, estos son desarrollos polifacéticos, que involucran actividades económicas, socioculturales, políticas, y  ecológicas que penetran todas las esferas de la vida diaria, pero además la globalización es desigual tanto en la manera en que queda afectada por su encuentro con cada cultura local, es desigual porque los procesos ocurren en cada país a velocidades distintas, queda afectada por cuanto, al tiempo que impacta a la gente, queda a la vez moldeada por ella.
En sí la globalización queda definida en su totalidad como la expansión económica de un país altamente desarrollado englobando en su economía a un país menos desarrollado lo que provoca que en su conjunto la cultura de este país, así como la tecnología, la política  y las comunicaciones se vean grandemente influenciadas por las características del país mas altamente desarrollado; dando inicio o una abertura para que crezca una cultura que es totalmente ajena a las de este país; ya que existe una afirmación: la cultura es un fenómeno que afecta al individuo que esta en contacto con el ambiente o medio en que se desarrolla. (Acosta,  2002).
b) Que se entiende por  Cultura
Conjunto de rasgos distintivos, espirituales y materiales, intelectuales y afectivos, que caracterizan a una sociedad o grupo social en un periodo determinado. El término cultura engloba además modos de vida, ceremonias, arte, invenciones, tecnología, sistemas de valores, derechos fundamentales del ser humano, tradiciones y creencias. A través de la cultura se expresa el hombre, toma conciencia de sí mismo, cuestiona sus relaciones, busca nuevos significados y crea obras que le trascienden.
Pero en una cultura global se pierde todo el sentido de comunidad solo se buscan los intereses comerciales y de expansión de poder unilaterales enajenando con ello a las comunidades más pobres y realmente afectando su forma de vivir.
El rápido cambio económico local debido a la economía global genera cambios sociales acompañado de tensiones sociales, la gente puede manejar esas tensiones en la medida que se lo permitan las formas heredadas del conocimiento y compresión del mundo, el éxito de su adaptación depende de que hasta que punto puede forjar un nuevo consenso sobre como reinterpretar y adaptar la cultura heredada, al irse abriendo ellos mismos a la interacción con otras culturas se desarrolla cierto pluralismo dentro de la misma cultura.
El término cultura se usa aquí para detonar la manera en la que un grupo de personas vive, piensa, siente, se organiza, celebra y comparte la vida en todas las manifestaciones y expresiones de la cultura, subyace un sistema de significados, valores y criterios y de visiones del mundo que se traducen en lenguajes, gestos, símbolos, roles, estilos y esquemas de vida. Tanto los aspectos materiales arte, artesanías, tecnología, como los inmateriales valores, actitudes, creencias de la cultura son elementos esenciales de la vida humana, constituyen el marco dentro del que funcionan las comunidades al dar un significado común, función interpretativa y una valoración común, función normativa a sus actitudes económicas, sociales, políticas y religiosas, además operan a través de instituciones familia, iglesia, mercado, gobierno, asociaciones voluntarias cuyos procesos pueden desarrollarse o cortarse a lo largo del tiempo, en tiempos de cambios sociales hace falta una reevaluación permanente de las practicas aceptadas.(Cohen, 1988).
La cultura de una nación es para acabar pronto es el modo de ser de la gente y de identificarse con ella, de sobrevivir a la opresión y de defenderse, de habitar y ennoblecerse en la pobreza, es muy destacable la cultura y el interrumpido afán de muchedumbre por favorecerse incluso por favorecerse y modernizarse. (Cordera/ Tello, 1984: 125).
La cultura de los seres humanos es única entre todas las culturas del reino animal, por su capacidad para criar y sustentar su propia cultura en una sociedad, la cultura es por lo tanto un resultado total de la invención social y debe considerarse como una herencia social ya que se transmite con respeto de cada generación. La cultura es la que da el sentido a las palabras sobre todo si por ella no solo se entiende la manifestación del hombre vertida en el arte, sino también las formas de organización humana presentes en la vida cotidiana. (Leo, 1988:16).
La cultura de la pobreza es una adaptación y una reacción de los pobres a su marginación por parte de una sociedad capitalista estratificada en clases y muy individualista también representa un esfuerzo por enfrentar las sensaciones de desesperanza y desesperación. (Lewis, 1986: 109).
La cultura no es más que una colección de conducta. Es la suma total de rasgos de conducta que son manifestadas y compartidas por los miembros de una sociedad. (Serrano, 1986: 616).
La cultura es la que todo ser humano tiene derecho a disfrutar de los beneficios de la cultura de nuestras generaciones pretéritas nos han dejado como la mejor riqueza que la humanidad ha venido atesorando a través de su desarrollo histórico. (Turok, 1987: 246).
La cultura pretende seguir, y por lo tanto, facilitar desde el primer momento el acceso a los problemas que contiene y  punto de vista con que son estudiados. (Wever, 1935:9). 
A medida de que las instituciones asociadas con los mercados globales traen nuevos significados y valores a las instancias culturales locales, se in testifica también el ritmo de cambio, los medios modernos de comunicación social , el transporte y el turismo, así como el mundo de los negocios, difunden nuevas ideas y conductas que alteran la vida diaria de la gente, entran en las culturas locales nuevas ideas sobre derechos humanos, incluida la igualdad de genero, procedimientos democráticos, economía de mercado, métodos de producción y esquemas de consumo.
Dado que viene de afuera y trae consigo el peso y atractivo de lo global y común, todo ello puede incrementar el sentimiento de perdida de control de la comunidad sobre si misma, por una parte, una comunidad puede  reafirmarse a si misma rechazando todo lo que se asocie con la globalización, pueden surgir entonces movimientos de oposición centrados en las particularidades religiosas, nacionales, raciales o étnicas, pueden volcarse hacia el fundamentalismo y en algunos casos incluso hacia la violencia indiscriminada, en el otro extremo, otra reacción puede ser la asimilación acertica de la conducta global.
Entre estos dos extremos de reinterpretación y reevaluación de la vía tradicional y la manera de negociar por parte de las comunidades, la gente puede buscar adaptaciones y cambios dentro de una amplia gama de caminos alternativos, este tipo de responsabilidades implica apreciaciones racionales de las opciones viables, pero, en cuanto a problema cultural, estas van mas allá de una racionalidad instrumental, lo crucial para una apreciación racional de tales opciones es la habilidad de la gente en participar en discusiones publicas sobre el asunto, esas discusiones requieren comprender como funciona la globalización. La cultura y sociedad es un grupo de fenómenos que viven en una comunidad durante cierto tiempo que ocupan en un territorio eventual, empiezan a organizarse como unidad social distinta de otros grupos, los miembros de una sociedad comparten también una cultura.
Supuesta la creciente apertura de las culturas y las formas desiguales en que ellas actúan y se influyen entre ellas, estas discusiones publicas ocurren tanto entre culturas como dentro de cada una de ellas, una participación idónea requiere un ambiente social global dentro del que cada cultura tenga su voz, en un mundo de pluralismo cultural ninguna cultura puede arrogarse ser la norma para las otras, en esta situación, la perspectiva superior del bien común global solo puede ser el resultado de un dialogo intercultural que se refiera a las tensiones entre mercado y sociedad en las decisiones sobre política económica.
c).- La cultura como parte del trabajo.
El fenómeno del trabajo humano es por mucho el tema mas reiterado dentro de las narraciones llegadas de los centros que participan en la red de globalización económica y cultura, pues los relatos lo revelan desde varios ángulos distintos, como lo son, empleo y desempleo, migración laboral, condiciones laborales, conocimiento como recurso para generar riqueza, exclusión social y económica del mercado de la que surgen nuevas formas de pobreza, al tiempo que todos estos casos reflejan aspectos negativos de la experiencia globalizadora, ilustran a la vez el profundo sentido cultural del trabajo, ejemplifican como el trabajo es una parte significativa de la vida humana, que permite a la gente mucho mas que tener unos pesos y ganarse la vida, les permite además participar en la sociedad, en su cultura, su economía y en los procesos de toma de decisiones, pues estos aspectos del trabajo, arriba mencionados, son oportunidades concretas en las que ocurren la participación y  el desarrollo humano.
La gente estructura sus economías de acuerdo al sentido y valor particular que da a su trabajo, la economía global de mercado en expansión, con su cultura, afecta la organización  del trabajo y desafía a la gente a responder de manera creativa en el nivel local, ejemplo de esto son las actividades de las empresas nacionales y trasnacionales de las agencias gubernamentales y de las instituciones multilaterales que marcan el paso del cambio en las pautas laborales tradicionales, condiciones de trabajo, estilos organizativos, valor social de las diversas ocupaciones y salarios, lo hacen con la introducción de nuevas tecnologías y normas de producción, el progreso tecnológico aumenta la importancia del conocimiento humano y la demanda por trabajo calificado, estas condiciones provocan a su vez una sobre oferta de trabajo no calificado y de ahí el desempleo entre los trabajadores no calificados de los sectores tradicionales, la organización laboral disminuye la importancia del trabajo no calificado en la comunidad y merma la capacidad de participación entre los desempleados, afectando también a las relaciones familiares y tribales, cuestiona la división tradicional del trabajo, principalmente entre hombres y mujeres o reforzando en cambio las divisiones generacionales en los esquemas de conocimiento, gusto y consumo, en consecuencia, la reorganización del trabajo es una de las principales vías por las que la economía global causa impacto en las culturas locales.
La globalización trae consigo una asimilación cultural urbana. La explosión demográfica y el aumento de los jóvenes impactan en la organización familiar, la estructura del trabajo y las diversiones y el ocio.
La globalización es un fenómeno que se experimenta en todo el mundo. Hay malestares e inconformidades tanto en los países pobres como en los ricos. La famosa “competencia internacional” resulta cara, aumenta la inequidad y genera problemas sociales. Es necesario crear normas que no debiliten la autonomía de los estados. También es conveniente formar una ética universal a la que se sometan los mercados mundiales. Tenemos que aprovechar al máximo las ventajas que proporciona la globalización cultural, que acerca a los pueblos y los enriquece, y representa una gran oportunidad para elevar el nivel de vida de las comunidades, y combatir la llamada globalización financiera que hasta el día de hoy se rige sin normas y que responde a intereses particulares y atenta contra la economía de las naciones y de vastas regiones del mundo.

globalizacion



cultura


La cultura es el conjunto de todas las formas, los modelos o los patrones, explícitos o implícitos, a través de los cuales una sociedad se manifiesta. Como tal incluye costumbres, prácticas, códigos, normas y reglas de la manera de ser, vestimenta, religión, rituales, normas de comportamiento y sistemas de creencias. Desde otro punto de vista se puede decir que la cultura es toda la información y habilidades que posee el ser humano. El concepto de cultura es fundamental para las disciplinas que se encargan del estudio de la sociedad, en especial para la psicología, la antropología y la sociología.

La Unesco, en 1982, declaró:
...que la cultura da al hombre la capacidad de reflexionar sobre sí mismo. Es ella la que hace de nosotros seres específicamente humanos, racionales, críticos y éticamente comprometidos. A través de ella discernimos los valores y efectuamos opciones. A través de ella el hombre se expresa, toma conciencia de sí mismo, se reconoce como un proyecto inacabado, pone en cuestión sus propias realizaciones, busca incansablemente nuevas significaciones, y crea obras que lo trascienden.
(UNESCO, 1982: Declaración de México)
Aunque muchas de las concepciones sobre cultura en el lenguaje común tienen su origen en el debate de las ciencias sociales, o bien, existieron primero en el habla cotidiana y luego fueron retomadas por las segundas, aquí se presenta un repaso sobre la construcción histórica del concepto de cultura en las disciplinas sociales.

globalizacion


La globalización es un proceso económicotecnológicosocial y cultural a gran escala, que consiste en la creciente comunicación e interdependencia entre los distintos países del mundo unificando sus mercados, sociedades y culturas, a través de una serie de transformaciones sociales, económicas y políticas que les dan un carácter global. La globalización es a menudo identificada como un proceso dinámico producido principalmente por las sociedades que viven bajo el capitalismo democrático o lademocracia liberal y que han abierto sus puertas a la revolución informática, plegando a un nivel considerable de liberalización y democratización en su cultura política, en su ordenamiento jurídico y económico nacional, y en sus relaciones internacionales.
Este proceso originado en la Civilización Occidental y que se ha expandido alrededor del mundo en la últimas décadas de la Edad Contemporánea (segunda mitad del siglo XX) recibe su mayor impulso con lacaída del comunismo y el fin de la Guerra Fría, y continúa en el siglo XXI. Se caracteriza en la economía por la integración de las economías locales a una economía de mercado mundial donde los modos de producción y los movimientos de capital se configuran a escala planetaria (Nueva Economía) cobrando mayor importancia el rol de las empresas multinacionales y la libre circulación de capitales junto con la implantación definitiva de la sociedad de consumo. El ordenamiento jurídico también siente los efectos de la globalización y se ve en la necesidad de uniformizar y simplificar procedimientos y regulaciones nacionales e internacionales con el fin de mejorar las condiciones de competitividad y seguridad jurídica, además de universalizar el reconocimiento de los derechos fundamentales de ciudadanía. En la cultura se caracteriza por un proceso que interrelaciona las sociedades y culturas locales en una cultura global (aldea global), al respecto existe divergencia de criterios sobre si se trata de un fenómeno de asimilación occidental o de fusión multicultural. En lo tecnológico la globalización depende de los avances en laconectividad humana (transporte y telecomunicaciones) facilitando la libre circulación de personas y la masificación de las TICs y el Internet. En el plano ideológico los credos y valores colectivistas ytradicionalistas causan desinterés generalizado y van perdiendo terreno ante el individualismo y elcosmopolitismo de la sociedad abierta. Mientras tanto en la política los gobiernos van perdiendo atribuciones ante lo que se ha denominado sociedad red, el activismo cada vez más gira en torno a lasredes sociales, se ha extendido la transición a la democracia contra los regímenes despóticos, y en políticas públicas destacan los esfuerzos para la transición al capitalismo en algunas de las antiguaseconomías dirigidas y la transición del feudalismo al capitalismo en economías subdesarrolladas de algunos países aunque con distintos grados de éxito. Geopolíticamente el mundo se debate entre la unipolaridad de la superpotencia estadounidense y el surgimiento de nuevas potencias regionales, y en relaciones internacionales el multilateralismo y el poder blando se vuelven los mecanismos más aceptados por la comunidad internacional.
La valoración positiva o negativa de este fenómeno, o la inclusión de definiciones o características adicionales para resaltar la inclusión de algún juicio de valor, pueden variar según la ideología del interlocutor. Esto porque el fenómeno globalizador ha despertado gran entusiasmo en algunos sectores, mientras en otros ha despertado un profundo rechazo (antiglobalización), habiendo también posturas eclécticas y moderadas.